Como vimos en el artículo anterior, no hay duda. Ir en bici al trabajo nos aporta muchos beneficios. Ahora bien, si acabas de empezar o quieres intentar ir en bici al trabajo, es posible que tengas algunas dudas o preguntas.

No te preocupes, estás en el artículo indicado. A continuación, te daremos algunos consejos para que tus trayectos de ida y vuelta a tu centro de trabajo sean fáciles y seguros.

ESCOGE LA BICICLETA

No hace falta que uses una bicicleta especial. Cualquier bicicleta que tengas en casa te puede servir. Quizás va siendo hora de rescatar esa bicicleta que tienes olvidada en el trastero cogiendo polvo.

Si no tienes bicicleta propia, averigua si en tu ciudad tienes a tu disposición bicicletas públicas compartidas. Si tu ciudad ofrece este servicio, ¡adelante! Es hora de sacarte el abono.

Si no tienes bicicleta y tampoco tienes cerca de casa un servicio de bicicletas públicas compartidas, quizás sea buen momento para comprarte una.

Si no quieres realizar un gran desembolso tienes un amplio abanico de posibilidades en el mercado de segunda mano. Seguro que conoces alguna App de compra-venta de segunda mano donde podrás buscar la bicicleta que quieres o tal vez conoces alguna tienda física que vendan bicicletas reparadas y restauradas. De esta manera, contribuirás con el reciclaje y estarás dando una segunda vida a esas bicicletas.

Por el contrario, si quieres estrenar bicicleta, te animamos a que te acerques a la tienda de bicicletas de tu barrio donde encontrarás un trato al cliente cercano y te ofrecerán la bicicleta adecuada para tus necesidades. Otra opción sería acudir a los grandes almacenes de venta de material deportivo o incluso puedes realizar la compra de tu bicicleta en una tienda online.

En cuanto a modelos de bicicleta, te sugerimos los siguientes:

  • Bicicleta de paseo: Son excelentes para circular por ciudad porque vas erguido y con la cabeza levantada. De esta forma, te permitirá estar siempre atento a todo lo que sucede a tu alrededor. Además, disponen de un manillar amplio para darte más estabilidad.
  • Bicicleta plegable: Si en tu centro de trabajo tienes algún sitio o incluso un hueco debajo de tu mesa, no descartes las bicicletas plegables, son ideales para la ciudad. Te olvidarás de candarla en el exterior y durante tu jornada laboral la tendrás siempre a la vista.
  • Bicicleta eléctrica: Si buscas comodidad, solventar las pendientes con facilidad o evitar la sudoración, la bicicleta eléctrica es lo que estás buscando. Hoy en día existe una gran variedad de bicicletas eléctricas que te facilitarán esos trayectos al trabajo y lo harás con menos esfuerzo.
bicicleta eléctrica Moma

REVISA LA BICICLETA

La bicicleta debe estar siempre en buenas condiciones. Si cuidas tu bicicleta, prácticamente no tendrás ningún problema con ella.

Sea cual sea la bicicleta, antes de ponerte en marcha, revísala mínimamente comprobando la presión de los neumáticos, los cambios, los frenos y las luces.

No olvides realizar mantenimientos periódicos. En el caso de haber rescatado una bicicleta vieja, acude a un taller de bicicletas cercano o de confianza para hacerle una buena puesta a punto.

Incluso si te gusta, como algunas tareas de mantenimiento no son muy complicadas, las podrás hacer tú mismo.

NO OLVIDES LOS ACCESORIOS

Muchos accesorios para la bicicleta o para el propio ciclista urbano son necesarios e incluso obligatorios. Por lo tanto, no te olvides de ellos.

En este apartado te mencionamos brevemente los accesorios que debes tener. Si quieres ampliar esta información, no te pierdas la entrada ‘Ir en bici al trabajo: accesorios‘ donde profundizamos en cada uno de ellos y además, completarás la trilogía de artículos dedicada a ir en bici al trabajo.

Accesorios para el ciclista

  • Casco
  • Chaleco reflectante
  • Kit de aseo personal

PLANEA TU TRAYECTO

Teniendo claro los puntos anteriores, ya puedes planear tu trayecto. Al hacerlo, sabrás de antemano las opciones que tienes a tu disposición para escoger el camino más cómodo y fácil para ir en bici.

Sírvete, por ejemplo, de Google Maps para planificar el trayecto entre tu casa y el centro de trabajo. Escoge la ruta más favorable para circular con bicicleta. Intenta dar preferencia a los carriles bici, ciclocalles o calles 30 con un solo sentido de circulación porque posiblemente tengan un tráfico más calmado que las grandes avenidas.

Quizás el trayecto no sea lo más recto posible y sea algo más largo y sinuoso comparado con lo que estabas haciendo hasta ahora con tu vehículo a motor. No te preocupes por eso, agradecerás tener un trayecto lo más pacífico posible.

Por cierto, en esta simulación con Google Maps, ¿has mirado el tiempo que te costaría llegar a tu destino? Lo debes tener en cuenta para saber el tiempo que necesitas y saber a qué hora tienes que salir de casa.

PRACTICA ANTES

Una vez tengas el trayecto predefinido, es hora de subirse a la bicicleta y comprobarlo. Pero no lo compruebes el mismo día que vayas a ir a trabajar. Te aconsejamos que lo compruebes con anterioridad.

Sería bueno que, por ejemplo, elijas algún día del fin de semana para realizar ese trayecto. De esta manera comprobarás in situ, con menos tráfico, sin prisas y sin el agobio del reloj cómo es el trayecto que has escogido. Incluso es posible que te des cuenta en ese momento que cierta calle o alguna parte de esa ruta no es tal como lo pensabas y desees variar la ruta. También comprobarás el tiempo real que tardas en realizarlo.

Por eso es bueno hacerlo con anterioridad para que el primer día que vayas en bici al trabajo vayas con total confianza.

CONDUCE CON SEGURIDAD

Este punto es fundamental. Ir en bici al trabajo tiene que ser seguro. Por eso, es necesario tener en cuenta lo siguiente.

Respeta las normas de circulación

Una bicicleta es un vehículo y, debe respetar las normas de circulación. No te saltes los semáforos en rojo. No vayas en contra dirección si no hay señal específica que lo permita.

Respeta a los peatones

Los peatones son los usuarios más débiles de nuestras calles. Respétalos.

Evita ir por la acera, a menos que haya un carril bici expreso en ella. En algunas ciudades te pueden sancionar. Si no tienes otra opción que pasar por una acera, bájate del sillín y camina con la bicicleta a tu lado.

Respeta los pasos de cebra. Recuerda, los peatones tienen preferencia. 

Evita las distracciones

Estar distraídos mientras circulas con la bicicleta compromete seriamente tu seguridad y la de los demás.

No utilices auriculares. En algunas ciudades están prohibidos con multas de hasta 200€ de sanción.

No te distraigas con el móvil. Al igual que los auriculares, no te permitirán estar 100% atento del entorno y no percibirás los peligros o señales del resto de usuarios de la vía. Además, también conlleva multa por ello.

Sé proactivo

Puedes evitar ciertos peligros si mantienes una conducción proactiva. Para ello debes anticiparte a los movimientos que pueden realizar los vehículos que te rodean.

Además, tú también debes ser previsible para el resto. Una manera de hacerlo es, señalizando los giros y maniobras que vas a realizar. Anticípate y señaliza siempre.

En zonas urbanas, siempre que te sea posible, ocupa el carril que esté más a la derecha posible, pero siempre circulando por el centro del carril para evitar dos cosas:

  • Obligar al coche que quiera adelantarte a ocupar el otro carril. De esta manera, te rebasará cumpliendo con la distancia mínima de seguridad y no pasará cerca de ti.
  • No te acercarás a los vehículos estacionados. De esta manera, evitarás el dooring, es decir, si alguno de esos vehículos estacionados abre la puerta sin mirar, no colisionarás con ella.

IR EN BICI CON FRIO O CALOR

Cuando nos encontramos en los meses donde aprieta el calor o el frío, deberás tener en cuenta alguna cosa más para que el calor o el frío no te impida dejar la bicicleta aparcada.

Por eso, te recomendamos leer los artículos Bicicleta con calor, ¿es compatible? y Que el frío no te impida ir en bici donde encontrarás consejos que te ayudarán muchísimo.

CANDA CORRECTAMENTE LA BICICLETA

Si finalmente has optado por una bicicleta plegable y puedes dejarla a tu lado en el centro de trabajo, no hace falta que tengas en cuenta este punto.

En cambio, si tienes que dejar la bicicleta en el exterior, debes candarla correctamente si lo quieres es encontrártela en el mismo sitio cuando salgas de trabajar.

Te aconsejamos que leas atentamente la entrada ‘Candado para bicicleta, cómo utilizarlo. Encontrarás consejos prácticos para saber dónde dejarla y cómo candarla.

Hasta aquí los consejos que podemos ofrecerte. Quizás te parezcan muchas cosas a tener en cuenta, pero no te preocupes. Una vez hayas salido un par de veces, te darás cuenta lo sencillo que es y no querrás otro medio de transporte para ir a trabajar.

Aunque sean muchos consejos, seguro que alguno nos hemos dejado en el tintero. Si quieres aportar algún consejo o ampliar algún punto de los que hemos comentado en el artículo, te invitamos a dejar tu comentario más abajo.

De todas formas, si aún no te ves preparado o preparada, ¿por qué no pides ayuda a alguien más experimentado para que te acompañe? Además, es posible que en tu ciudad exista alguna asociación o grupo de ciclistas urbanos que estarán encantados de ayudarte.

Si no lo has hecho ya, te animamos a ir en bici al trabajo o al menos inténtalo. Te cambiará en muchos aspectos, todos ellos positivos, ¿por qué no lo compruebas?

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